Después de 15 días de trabajo intenso llega el viernes; y los viernes nos espera nuestra ración semanal de pinchos morunos y pasteles diversos como postre. La Tita y Bienve nos cuidan bien. Pero antes decidimos, después de varios intentos infructuosos, fotografiar la nueva moto de Víctor; una sssstupenda (cuanto bien nos ha hecho Forges) Harley 883. Como Julián es un pelusilla, acerca su Intruder y se apunta a la sesión fotográfica.
Julián y Víctor… lo de debajo son sus máquinas.
Como Carlos está de fotógrafo y tampoco le hace mucha gracia salir, Francesc se apunta en el último momento, más que nada para hacer bulto… y demostrar que también se puede poner cara de bobo sin necesidad de tener una moto debajo